Virgen de Lourdes
Llegó como asustada, no sé con qué pesares
Temblándole las manos, con fe se persignó
Y de su pañoleta sacó un ramo de azahares
Que junto a unas muletas a la virgen dejó
Le dijo que era enfermera y solo le rogaba
Pidiendo por su hijito que no quería morir
Porque si era el destino; sin él no se marchaba
Cuando oí que ella llorando le suplicaba así
¡Virgen; Virgen de Lourdes!
A que me ayudes vengo con fe
Quiero con tus milagros
Poder cuidarlo en su niñez
Virgen; no me abandones
Hacé por mi hijo que viva yo
Porque jamás lo podré dejar
Sin madre y sin hogar
Siguió mirando fijo; la imagen de la virgen
Secó con un pañuelo todo lo que lloró
Después avergonzada; miraba a todos tristes
Como si adivinaran su amarga confesión
Igual siguió rogando; sin importarle nada
Que allí crucificada con sus manos quedó
Pero después sus brazos abrió desesperada
Cuando oí que llorando volvía esta canción
¡Virgen; Virgen de Lourdes!
A que me ayudes vengo con fe
Quiero con tus milagros
Poder cuidarlo en su niñez
Virgen; no me abandones
Hacé por mi hijo que viva yo
Porque jamás lo podré dejar
Sin madre y sin hogar