Los locos del Borda
La historia, no recordará,
a esos espectros, que andan solos con su alma,
cabalgan, cabalgan, cabalgan en sus fantasías, persiguen lo deseable
y no se frenan con drogas inyectables,
mirando arriba esperando a alguien bajar,
sin dientes, como si la vida les quitara voracidad,
el vientre tan hinchado de comer verdades, avanzan,
avanzan, avanzan sin popularidad,
no necesitan trámites para acceder a la vida,
el pueblo esta dispuesto a perdonar a un terrible asesino,
pero siempre escupirán en la cara del que piense distinto,
aunque cante a veces, tengo la impresión de que la gente
escucha las frases que acompañan su caída,
miro mi guitarra y la veo tan inútil,
me arranco la garganta y quiero gritar,
un auto es más acariciado que un hombre extraño.
Me arranco la garganta y quiero gritar,
un auto es más acariciado que un hombre extraño