Esta Noche No Se Parece a Ninguna
La luna cumple su cometido
de enamorar a los desprevenidos
esta noche que no se parece ninguna.
Los campos extienden su quietud
como el avance de una multitud
con el estruendo de una canción de cuna.
Dime si hay mar de fondo bajo el firmamento
o son sólo nuestras respiraciones,
si hay pan de oro recubriendo los lamentos si el porvenir es de los madrugadores.
Las malas hierbas no tienen dios,
Crecen soledades de dos en dos en esta noche que no se parece a ninguna.
El horizonte tiembla bajo el cielo como si quisiera levantar el vuelo allí donde las estrellas se desnudan. Dime si nunca renunciaremos al presente
o si este para siempre sólo es provisional,
si nuestro tiempo se acaba lentamente
o es sólo una huida que no puede acabar mal.