Calandria (Dejá el bodegón)
Enrique Cadícamo
Dejá esa copa de vino
si sos un hombre bien derecho
por más que te hayan hecho
no te debés arrumbar...
Ahí tirao como un retazo
en esa turbia cantina
solo te espera la ruina,
vení haceme caso... ¡Te quiero salvar!...
Calandria,
¿por qué estás triste?
Muchacho,
¿por qué llorás?
Ya tu guitarra guardó sus voces
y allá en un clavo colgada está...
Calandria,
tu viejo patio
se apena
por tu dolor...
y hasta las flores del conventillo
palidecieron de un vago langor...
Dejá esa copa de vino
y hacete un hombre, que la vida
no la tendrás perdida
si aún te queda corazón...
Olvidate de esa ingrata,
si ella nunca te ha querido
hacé de nuevo tu nido,
vení, hacema caso... ¡dejá el bodegón!