Ponme
Ponme donde no alcance tu estatura
Donde tu luz no sea imaginable
Ponme ante la pared, detrás del sable
O hazme lo que a los miedos la lectura
Ponme los instrumentos de tortura
Y aprieta el torniquete, por si acaso
Ponme donde Petrarca o Garcilaso
O ponme en el camión de la basura
Ponme donde nacer esté prohibido
O donde los crupieres del nirvana
Apuesten nuestras dichas al olvido
Ponme en tu palomar o en tu ventana
Que yo seré el candil que siempre he sido:
Uno que solo alumbra con tu llama
Que solo alumbra con tu llama
Que solo alumbra con tu llama
Que solo alumbra, que solo alumbra
Que solo alumbra con tu llama
Que solo alumbra con tu llama