Aquel Don Juan
Francisco Brancatti / Rafael Miguel Sánchez
Al ocultar la tarde gris se vio esfumar sin un matiz
Luego triunfal la noche entró y el arrabal enmudeció
En el mutismo del barrio reo junto a las rejas de un fiel amor
De una guitarra brota un punteo y se oye el canto de un trovador
Luego el Chairaje de los aceros anuncia un duelo en el arrabal
Se oye una queja; calla el coplero y huye la sombra del criminal
Cuando expiró aquel don Juan triste se oyó ladrar un can
Y con dolor de un ventanal gimió la flor del arrabal
Bajo la noche Que Ya dormita en el silencio del callejón
Con honda pena la virgencita lleva sus manos al corazón
Y mientras llora de aquel vencido amargamente su fin fatal
En el misterio queda dormido el nuevo lance del arrabal