Sonata de La Luna de Marrakesh
Te conocí de noche en la ciudad de la adelfa blanca,
por la calle dormida donde los hombres muerden las flores
yo cantaba al diablo con la barbuka por la muralla
que andabas como un gato por la medina de Marrakesh.
Estabas tan vistosa y yo tan loco de madrugada
buscando entre las sombras la melodía de los recuerdos
en aquella taberna donde la luna sólo era un sueño:
el sueño que tu boca contra mi boca puso de pie.
Ay como una estrella, ay cayó del cielo, ay con dos palabras:
habibi. Te quiero.
Y todo el mar dentro de ti. Y todo el mar fuera de mí.
Quien tiene prisa muere canta la luna por el desierto
yo lo aprendí en tu boca en una noche turbia de besos
buscando en la Medina el corazón de la adelfa blanca
por la calle dormida donde tus ojos yo te encontré.
Ay como una estrella, ay cayó M cielo, ay con dos palabras:
habibi, te quiero.
Y todo el mar dentro de ti y todo el mar fuera de mí.